Como ya va siendo habitual, las vacaciones siempre las dejamos para la época navideña. ¡Me encanta la Navidad! así que disfruto por partida doble.
Hace dos años hice una ruta por tres ciudades preciosas: Praga, Viena y Budapest, en pleno mes de Diciembre. Así que si alguno ha estado en estas ciudades sabrá que la mayoría de plazas y calles se llenan de casetas de madera decoradas con venta de productos navideños, decoración y comida, dando lugar a unos mercados navideños preciosos y con un ambiente fantástico.
Al primer día de llegar a Praga nos fuimos directos a la plaza de la ciudad vieja, donde está el famoso y visitado reloj y estaba inundado de casetas y puestos de comida. Había un ambiente extraordinario, todo lleno de gente, villancicos y un olor que salía de cada caseta delicioso.
Como cual can siguiendo un rastro, me vi empujada a seguir un aroma dulce a canela que me tenía completamente embriagada. Acabé en una caseta donde se estaban horneando una cantidad indecente de Trdelník. Éste es un dulce originario de la cocina eslovaca que está elaborado con una masa de harina que se enrolla en unos palos (trdlo) y se asa a fuego de brasas. Es muy habitual encontrarlos en todos los puestos de Praga.
Así que me zampé dos el mismo día y desde ese día pasó a ser uno de mis dulces favoritos.
Ya pasado el tiempo, un día estaba hablando en la tienda con una clienta que es checa y comentando el reportaje que hice de Praga para el número 8 de My Lovely Food Magazine. Le dije que quedé totalmente enamorada de los Trdelník y ella me dijo que en Tescoma ( marca número 1 en el mercado checo y eslovaco) tenían un molde para prepararlos!
Y unos meses más tarde,¡aparece en la puerta de la tienda con este molde fantástico que me compró en Praga cuando fue a ver a su familia por Navidad! Hay clientes que son un amor y que te compensan con detalles preciosos,
Así que esta entrada está dedicada a ella, a su marido y a su peque precioso por haber pensado en mí, por hacerme feliz como una perdiz con el molde de Trdelník!
El genial moldecito es de la marca Tescoma, lo podéis comprar en sus tiendas o en la online aquí.
También veréis un vídeo con el paso a paso para enrollarlos y hornearlos. A mí me gusta más que se vean las formas de la espiral, en el video los aplastan mucho y pierden la forma.
Para hacerlos más marcados, es importante hacer una tira bien larga, empezar a enrollarla seguida sin pasarla por encima de ella misma en el cilindro, y sobretodo y muy importante, que la masa quede bien sujeta por debajo de las gomas amarillas y que no nos quede ninguna zona de la masa más fina o que empiece a agrietarse porqué sino cuando lo comencemos a hornear, el rulo de masa se romperá y se caerá del cilindro. Pregúntame cómo lo sé 🙂
Trdelník caseros
Para 4 piezas
Ingredientes para la masa:
280 g de harina normal
150 ml de leche entera, tibia
70 g de mantequilla sin sal
15 g de azúcar glas
13 g de levadura fresca
3 yemas de huevo
1 pizca de sal
Ingredientes para la decoración:
200 g de azúcar
1 cucharadita de canela en polvo
2 cucharadas de azúcar de vainilla
Mezclamos la levadura, la leche y una cucharadita de azúcar glas (unos 5 gramos). Removemos hasta que se disuelva la levadura y reservamos.
Batimos la mantequilla junto a las yemas de huevo hasta que consigamos una masa espumosa, añadimos la harina y el resto del azúcar y mezclamos bien.
Agregamos la mezcla de levadura y leche y seguimos batiendo hasta que esté todo integrado.
Engrasamos con un poco de aceite la superficie de trabajo, nos engrasamos ligeramente las manos y retiramos la masa del bol.
Amasamos hasta formar una bola, la colocamos en un bol, cubrimos con un trapo húmedo y dejamos reposar 30 minutos en un lugar cálido (yo tengo el programa de fermentaciónen mi horno, que no deja de ser temperatura a 30ºC) si no, ahora que ya empieza a hacer fresquito, al lado de un radiador va más que bien para dejar subir la masa.
Una vez levado, traspasamos la masa a la superficie y la dividimos en 2 partes iguales.
Estiramos cada una de las partes haciendo un rulo, de un metro de largo aproximadamente.
Procedemos a enrollarlo en el cilindro, asegurándonos sobretodo que quede completamente cubierto con la masa y que las puntas de masa queden por dentro de las gomas amarillas. Hacemos rodar el cilindro sobre la superficie, aplastando la masa ligeramente. Procedemos del mismo modo con el segundo rulo de masa.
Colocamos los cilindros sobre la base metálica y pincelamos la masa con mantequilla derretida.
Horneamos unos 20-25 minutos a 180ºC. Cada 7-10 minutos giraremos los cilindros por la base de goma siempre con manoplas ya que estarán muy calientes.
Una vez estén bien dorados en su totalidad, los sacamos del horno y dejamos enfriar unos 5 minutos sobre la base metálica.
Mezclamos los dos tipos de azúcar junto a la canela en polvo y lo colocamos sobre una base de papel de horno.
Pintamos los dos rulos de masa con mantequilla derretida e inmediatamente los hacemos rodar sobre el azúcar, empapándolos bien.
Destacado: Es bueno consumirlos al momento, o el mismo día de hornearlos, estarán crujientes por fuera y blanditos por dentro y con un sabor a canela delicioso. Si los dejamos de un día para otro entonces quedarán duros. En muchos puestos de las casetas checas también le añaden Nutella.
Espero que os guste y os anime a probarlos, son unos dulces extraordinarios 🙂
¡¡En unos días unos brownies que son para morirse!!
Ingrid
9 comentarios
M´encanta aquesta recepta Ingrid!!! m´haig de comprar aquest cachibache 😉 jejejeje . Espero que no deixis mai el blog. Un petonarro!!!
Los probé en Budapest (que los llaman de otra forma) y me enamoré!! Busqué como loca los rodillos esos, pero no los encontraba y ya estaba pensando en hacerme un invento casero cuando he visto tu post. Gracias!!
Pues a mi me recuerdan mucho a lo que yo llamo buñuelos de caña, llamados así porque el rodillo no es otra cosa que una caña sobre la que se enrolla la masa. Los probaré sin duda.
L'últim desembre vam anar a Praga i vaig fer el mateix…seguia l'olor des de lluny. El segon dia els vam probar amb nutela i ja va ser amor per sempre.
Gracies per la recepta, m'ha recordat aquells dies.
Me imagino el aroma a canela… qué ricooo!, no me extraña que se haya convertido en uno de tus dulces favoritos!. Qué detalle el de tu clienta ;). Un beso.
Hacia tiempo que no te visitaba…lo que me estaba perdiendo!!
Hace poco he vuelto de Budapest y tambien hacen un dulce parecido, pero mas espeso.
Me encanta esta receta y probaré hacerla, aun cuando me invente algun tipo de molde para hacerlo.
Besotes
Me encantaría volver a Praga en época navideña, estuve en verano y ya me encantó, así que con la Navidad en el aire debe ser mágico :).
Mmmmm esos Trdelník!! Qué peligro hacerlos caseros, aunque me encantaría tener unos de los tuyos hoy para la merienda :). Qué bien te han quedado!
Un abrazo
No recordo haver tastat aquests dolços en el meu viatge a Praga. Clar que d'all`ja fa 20 anys…
Vaig veure la foto a Instagram i he vingut de seguida a veure la recepta. Espectacular!
Hola, y para hacerlos a brazas??? Vivo en México y para mí es fácil, supongo q se dejara suave el calor y sin rejillas el asador verdad???